Si nuestra casa o piso cuenta con un pequeño balcón o ventana podemos aprovechar y decorarlo con varios tipos de flores que aporten luz y color (si por desgracia no tenemos este espacio siempre podemos echar mano de las plantas interiores y ponerlas en nuestro salón, recibidor o dormitorio principal).

Si disponemos de una terracita donde toque el sol y tenemos el tiempo suficiente para dedicarnos al cuidado de nuestras plantas podemos proponernos un reto algo más comprometido y poner un pequeño arbolito, de forma que no solamente tengamos plantas y flores repartidas por el espacio exterior.

Existen muchos tipos de árboles en miniatura que permiten que podamos tenerlos y cuidarlos de manera estupenda sin necesidad de tener un gran jardín donde plantarlo. Si nos acercamos a una floristería veremos como podemos encontrar pequeños árboles frutales que dan naranjas, peras o limones, por ejemplo.

flores

Este último es un gran ejemplo para tener en cuenta a la hora de poner un arbolito en nuestra terraza, ya que además de dar color al lugar nos proveerá de limones que tanto en invierno como en verano nos ayudan a refrescarnos, adornar cócteles y condimentar nuestros platos (además cuenta con unas bonitas Flores blancas que crean un curioso y natural contraste con el amarillo del limón).

Para ello habrá que adquirir una maceta de barro tan grande como el tamaño de nuestro futuro limonero (dependiendo si lo compramos ya crecido o preferimos plantar las semillas) y gran cantidad de abono (en el lugar donde lo compremos nos indicarán que complementos son los más adecuados para nuestro arbolito, de forma que éste pueda crecer sano y sus limones tengan un rico sabor ácido).

Hay que estar atentos y darse cuenta que un limonero no es una pequeña flor que crece poquito y por tanto, hay que ir controlando sus raíces y tamaño (si éstas crecen demasiado pueden llegar a romper el tiesto y dañar al árbol ya que éste no tendrá el espacio que sus compañeras de abajo están requiriendo). Además hay que podar las flores y hojas marchitas y controlar que el tronco y tallos no sufren de ninguna plaga.

Y es que, si tenemos una pequeña terracita o balconcito, ¿porque conformarnos con plantar solo flores?. Los árboles frutales de tamaño reducido suelen tener unos precios bastante asequibles y no requieren de un gran sacrificio a la hora de cuidarlos, por tanto, son una fantástica opción para el espacio exterior de nuestra vivienda.