Seguro que si viviéramos en una casa con jardín tendríamos un espacio dedicado a nuestras flores y otro a nuestras verduritas y es que un pequeño huerto en casa es el sueño de muchas personas.
Con un huerto en nuestro jardín solucionaríamos el problema de quedarnos sin tomates o sin calabacines, por ejemplo, pero lo cierto es que mantenerlo es cansado, algo costoso y sobretodo algo difícil si no disponemos de una casa con una gran parcela exterior.
Es por esto que si vivimos en un apartamento con un pequeño balcón debemos conformarnos con tener macetas con flores y plantas que nos den luz y alegría pero lo que debemos saber es que en este pequeño espacio exterior también podemos tener nuestro propio huerto, y aunque éste no sea como tal ya que no tenemos un terreno donde plantar nuestras frutas y verduras podemos crearlo gracias a las macetas y el abono necesario para cada especie.
Una de las plantas que podemos poner junto a nuestras flores de colores es aquella que nos ofrece pimientos, de manera que podremos cultivar y controlar el crecimiento de este vegetal sin que apenas nos demos cuenta (sus cuidados son muy sencillos y no requieren de grandes conocimientos de jardinería).
Primero de todo hay que tener claro que no es lo mismo comprar una planta que ya está empezando a ofrecer pimientos que comprar las semillas y por tanto iniciar el proceso desde un principio, por tanto si no tenemos experiencia, tiempo o ganas de pasar un rato aprendiendo y controlando la correcta siembra lo mejor es que compremos nuestro ejemplar ya plantado (con las flores pasa lo mismo ya que normalmente las compramos cuando ya han florecido y de esta forma nos ahorramos tiempo, esfuerzo y costes).
Lo cierto es que si queremos que nuestra plantita crezca y nos ofrezca suculentos pimientos lo único que debemos hacer es tenerla en un lugar luminoso aunque evitando que el sol se encuentre de manera directa y regarla cada vez que notemos la tierra seca.
La maceta que escojamos también es importante ya que nuestra plantita necesitará de espacio suficiente para crecer y esparcir sus raíces y por tanto es aconsejable que sea un tiesto de dimensiones normales tirando a grandes.
También se aconseja que cada 10-15 días se eche fertilizante al abono y se remueva la tierra para evitar encharcamientos y la aparición de plagas y moho.
Y es que tener una pequeña plantita de pimientos en casa es tan fácil como tener una maceta de flores de color rosa. Por tanto, si queremos tener un pequeño huertito en casa no lo dudemos y hagámoslo.
