Todos los que tenemos en casa plantas y flores las tratamos con cuidado, las regamos cada vez que creemos que es necesario y las intentamos proteger de las inclemencias del tiempo y las plagas.
Ahora bien, toda esta delicadeza y cuidado se olvida cuando nos encontramos en una boda y queremos ser la candidata a recoger el ramo de flores que la novia lanzará de espaldas a las invitadas (en la mayoría de bodas las mujeres se empujan, saltan y mueven de un lado a otro con aspecto cómico y gracioso con el fin de conseguir tal codiciado ramo por parte de la novia).
También es cierto que aunque seguro que hemos visto esta escena mil veces o incluso hemos podido ser una de las protagonistas (sino en cualquier película o serie televisiva seguro que hemos contemplado en bastantes ocasiones este gracioso momento) la mayoría de mujeres desconocen cual es el origen de esta divertida y original tradición, en la que la novia se desprende de su tan amado ramito de flores para que una de sus invitadas se sienta princesa a pequeña escala por unas horas.
El origen del lanzamiento del ramo es sencillo y bastante arraigado a la superstición ya que desde hace muchos años se piensa que la afortunada que lo recoja será la próxima en encontrar el amor y espantar los espíritus de la soledad y la soltería de su lado. Hay que decir que la tradición ha ido cambiando y modernizándose con los años ya que lo que en un principio era una excusa para reunir en un corrillo a las solteras y que de esta forma los demás invitados vieran que éstas estaban disponibles se ha convertido en una lucha también entre las futuras casaderas que quieren recoger el bello ramo para “obligar” a sus parejas a dar el siguiente paso).
El lanzamiento del ramo de flores es sin duda uno de los momentos más esperados en toda boda aunque también es cierto que con el paso de los años esta tradición se ha ido “personalizando” y actualmente podemos encontrar a novias que lo sortean, lo ponen como premio en algún tipo de actividad competitiva entre las asistentes o lo regalan a un ser querido en señal de amistad, cariño o agradecimiento (se puede regalar a madres, hermanas, amigas, etc).
Lo que está claro es que sea cual sea el origen real de este lanzamiento se trata de una tradición divertida y original y por muchas variantes que vayan saliendo con el paso del tiempo, nunca se debería perder el momento en el que las invitadas luchan por alzarse con el bello ramo de flores.
