Consejos para que la mañana del día de San Valentín sea un éxito…
Aunque todos los años se celebra en la misma fecha, al igual que la Navidad, el día 14 de febrero siempre parece pillar a algunos por sorpresa, como las fiestas decembrinas. Este año cae en lunes, y merece la pena mencionarlo porque, además de que es más fácil olvidarlo por ser el inicio de la semana, también hay que organizarse con tiempo. Precisamente, te damos los ingredientes más importantes para que todo salga bien: disponer un poco de tiempo libre durante el día; prever una hermosa tarjeta personalizada hecha con amor; evidentemente, no olvidar el ramo de flores por qué no, ofrecer chocolates y compartir al menos una comida romántica. Tampoco pueden faltar el vino, si te gusta; mucha música y, tal vez, una buena película. Para terminar, el relax, la coquetería, los sueños compartidos, dar y recibir… El resto lo dejo a tu imaginación.
Pero, lo más importante de todo es dar un toque personal. Algo que salga del fondo de tu corazón. Planifiquemos el día: es lunes por la mañana, te despiertas… te vuelves a acostar. Pero, ¡qué digo! No, eso no está nada bien. Veamos de nuevo…
El programa comienza la noche anterior: prepara la cafetera y prográmala para que disfrutes de un café recién hecho cuando te levantes por la mañana. Después, deja el desayuno listo o, por lo menos, pon la mesa. ¡Y no te limites a sacar cubiertos y platos! Decora la mesa con flores, adórnala. De preferencia, escoge colores alegres, pero, eso sí, evita el exceso de rojo, que puede resultar un poco agresivo por la mañana. Los corazones nunca están de más. Por último, deja la tarjeta que tú mismo hiciste con tu mensaje de amor en el sitio de la persona que amas.
